
Foto: CUARTOSCURO
La iniciativa busca prohibir cualquier intervención extranjera y endurecer penas por tráfico de armas.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció el envío de una reforma constitucional al Congreso de la Unión para reforzar la soberanía nacional y endurecer las penas contra el tráfico de armas.
Este anuncio se da un día después de que el gobierno de Estados Unidos, bajo la administración de Donald Trump, designara a seis cárteles mexicanos como organizaciones terroristas.
Durante su conferencia matutina del jueves 20 de febrero de 2025, Sheinbaum explicó que la reforma tiene dos elementos clave:
La mandataria mexicana subrayó que la relación con Estados Unidos debe basarse en colaboración y coordinación, pero sin injerencismo ni subordinación.
“Nosotros lo que queremos dejar claro frente a esta designación es que no negociamos la soberanía. Ellos pueden ponerles el nombre que quieran a estos grupos, pero con México es colaboración y coordinación, nunca subordinación, no injerencismo y menos invasión”, enfatizó Sheinbaum.
Horas después del anuncio, el Senado de la República recibió la iniciativa, lo que marca el inicio de su discusión en el Poder Legislativo.
La reforma busca blindar la soberanía nacional y frenar cualquier intento de intervención extranjera en asuntos internos del país.
En su exposición de motivos, Sheinbaum argumentó que es necesario dejar en claro que México no permitirá “ningún tipo de intervención, intromisión o cualquier acto desde el extranjero que sea lesivo de la independencia, la integridad y la soberanía de la Nación”.
Además, la reforma refuerza la posición de México contra el tráfico de armas, estableciendo penas más severas para nacionales y extranjeros involucrados en su producción y distribución ilegal.
La iniciativa enviada al Congreso por la presidenta Claudia Sheinbaum se enfoca en dos puntos clave:
Esta reforma se presenta como una respuesta directa a la designación de cárteles mexicanos como organizaciones terroristas por parte de Estados Unidos, una decisión que Sheinbaum ha calificado como “un riesgo para la soberanía de México”.