
Foto: iStock
Donald Trump genera tensión económica mundial con el llamado “Día de la Liberación”, enfocado en una política proteccionista a los Estados Unidos.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, mantiene al mundo en vilo debido a su política arancelaria que este 2 de abril escalará a un siguiente nivel.
No solo te informamos, te explicamos la política. Da clic aquí y recibe gratis nuestro boletín diario.
Apenas el pasado 26 de marzo anunció la imposición del 25% de aranceles a automóviles no fabricados en Estados Unidos, sin embargo en el llamado “Día de la Liberación” anunciará otros más, que podrían tensar las relaciones comerciales con los países socios.
Este 2 de abril entran en vigor los aranceles recíprocos y también los que tienen que ver con la industria automotriz, no obstante, México había declarado que buscaba un “trato preferencial” debido al cobijo del Tratado comercial de América del Norte (T-MEC) en ese tema.
El acuerdo comercial, que entró en vigor en 2020 y se revisará en 2026 (o antes) permite tener un trato libre de aranceles incluso a las autopartes y los vehículos armados en los países socios.
Ante este panorama, la Casa Blanca salió a matizar la orden ejecutiva de Trump, para tranquilizar a la industria automotriz de la región.
Harrison Fields, asistente especial del presidente Donald Trump, precisó que las piezas de automóviles que cumplen con el T-MEC “permanecerán libres de aranceles” hasta que el secretario de Comercio, Howard Lutnick, y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EUA (CBP) establezcan un proceso para su aplicación.
Debido a la aclaración, surge una especie de esperanza sobre si México se salvará de los aranceles tanto para los automóviles como las autopartes procedentes de nuestro país y Canadá.
La Casa Blanca emitió un comunicado en donde detalló que los automóviles bajo el acuerdo comercial del T-MEC tendrán una oportunidad de certificar su contenido estadounidense y se implementarán sistemas para que el arancel del 25% solo sea aplicable al valor de su contenido no estadounidense.
Desde Washington, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, señaló que la instrucción de la presidenta Claudia Sheinbaum es buscar un “trato preferente” que proteja los empleos e inversiones en el país.
“Si van a cambiar el sistema, si vamos a ir a un sistema de aranceles tan altos, lo tenemos que buscar es un trato preferente para México, de manera que tengamos condiciones de proteger nuestros empleos y la actividad económica de México”, dijo Ebrard.
En tanto, la presidenta Claudia Sheinbaum habló horas antes con el canciller de Canadá, Mark Carney, quienes coincidieron en la necesidad de fortalecer y mantener vigente el T-MEC.
Mientras tanto, anticipó que el jueves 3 de abril, el día después del anuncio, dará a conocer un programa integral para fortalecer a la economía mexicana y la propia industria automotriz; aunque no ha dejado claro si responderá a Donald Trump con aranceles.
Sobre este tema, Gabriela Siller, directora de Análisis Económico del Grupo Financiero BASE, explicó vía X, que hay autopartes que cruzan varias veces la frontera con Estados Unidos, por lo que el proceso para determinar si el producto está hecho en aquel país, podría tomar varios meses.
Agregó que al exentar por ahora a los autos enviados por México a Estados Unidos, el impacto económico a este país “no será tan grave”.
“Hay afectación por la incertidumbre pero no tanto en las exportaciones, pues el 82% de los autos que se exportan a Estados Unidos cumplen con el T-MEC”, indicó Siller.
De acuerdo con una revisión del IMCO, las reglas de origen de la industria automotriz establecen requerimientos de Valor de Contenido Regional (VCR) para diferentes partes: