
Foto: Cuartoscuro
Una columna de la periodista Mary Anastasia O’Grady publicada en el diario estadounidense cuestiona los alcances de la elección judicial.
Este domingo 1 de junio se llevó a cabo la primera elección judicial en la historia del país, un ejercicio que se inauguró a partir de la reforma judicial que fue aprobada en septiembre del año pasado, en el último mes del sexenio de Andrés Manuel López Obrador.
No solo te informamos, te explicamos la política.Da clic aquí y recibe gratis nuestro boletín diario.
881 cargos resultarán electos después de esta inédita jornada, desde las y los 9 ministros que conformarán la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), hasta las y los 5 magistrados que integrarán el nuevo Tribunal de Disciplina Judicial.
La elección generó mucha expectativa, aunque principalmente recibió críticas y cuestionamientos por la influencia de la 4T en los comicios, así como la falta de información sobre las candidaturas y las dificultades logísticas y operativas para organizar esta jornada electoral.
Estos señalamientos no solamente provinieron del interior, sino que también se produjeron en el extranjero.
Uno de ellos fue cortesía de un prestigioso medio estadounidense.
Un artículo de opinión publicado por el Wall Street Journal y escrito por la periodista Mary Anastasia O’Grady, considera la elección judicial como una farsa desde su título y apunta que es un intento por “politizar los tribunales”.
La pieza señala el papel que ha desempeñado la 4T para incidir en el Poder Judicial y colocar a personajes afines al movimiento a través de estos comicios.
“La balanza se inclinó a favor de los candidatos de Morena, quienes fueron elegidos por el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum y por la Legislatura controlada por Morena, a partir del reconocimiento de su nombre y no por sus méritos”, establece la publicación.
Pero además, el texto apunta a que la reforma judicial de López Obrador surge de su intento por “centralizar el poder” con el uso del aparato del Estado y el control sobre órganos como el INE y el Tribunal Electoral.
“Se apoderó del Tribunal Federal Electoral y del Instituto Nacional Electoral, organismo que se supone debe arbitrar las campañas y las elecciones. De esta forma, eliminó cualquier control sobre sus intervenciones ilegales en las campañas de 2024 para la Legislatura y la Presidencia”, argumentó O’Grady en el artículo.
La publicación continúa por mencionar que el poder de Andrés Manuel sobre estas instancias le valió que Morena y sus aliados pudieran conseguir la mayoría en el Congreso, retomando el caso de la llamada “sobrerrepresentación”.
Finalmente, la periodista reflexionó sobre las consecuencias que podría tener la elección judicial en los inversionistas extranjeros, quienes ven un panorama incierto por la falta de confianza que habrá en las instituciones.