
Foto: Hotel Mundo Maya Calakmul
Se estima que la obra tuvo un costo superior a los mil millones de pesos y un daño ecológico sin precedentes
Especialistas y opositores han criticado la construcción del Tren Maya, uno de los proyectos insignia del expresidente Andrés Manuel López Obrador, por su impacto ambiental y poca rentabilidad. Sin embargo, la obra continúa ampliándose.
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Ahora, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) construyó un hotel de lujo en la Reserva de la Biosfera de Calakmul, en el estado de Campeche, como expansión de las obras del Tren Maya.
El Hotel Mundo Maya Calakmul cuenta con cuatro torres de dos pisos, 144 habitaciones, alberca, gimnasio, bar, y un restaurante gourmet.
Para construir el complejo hotelero se deforestaron 30 mil metros cuadrados de selva virgen y se gastaron mil millones de pesos de recursos públicos.
En entrevista con Fuerza Informativa Azteca, el activista Michael Duhart denunció que el hotel “es un despropósito”, sin una planeación adecuada y en medio de una zona con condiciones ambientales hostiles.
El hotel forma parte de una red de seis instalaciones similares ubicadas a lo largo de la ruta del tren, bajo el nombre “Hoteles Mundo Maya”, los cuales costaron 6 mil millones de pesos.
Pese a la magnitud de la inversión, todavía no se han hecho públicos los costos de operación, los cuales se estiman elevados y lejanos al discurso de austeridad republicana.
En la región donde se construyó el complejo hotelero no hay agua potable, ni red de drenaje, ni energía eléctrica, por lo que todo debe trasladarse desde comunidades cercanas, incluso el agua llega en pipas.
La promesa de que el Tren Maya impulsaría el turismo en la región y beneficiaría a las comunidades locales no se ha cumplido, ya que los hoteles operados por la Sedena no superan el 30% de ocupación, ya que los vagones del tren llegan casi vacíos.