
Foto: Facebook
Durante la discusión en la Comisión de Presupuesto, el homicidio del alcalde de Uruapan acaparó los reclamos por falta de recursos en seguridad.

El asesinato del alcalde de Uruapan, Michoacán, Carlos Manzo Rodríguez, se coló en la discusión del Presupuesto de Egresos de la Federación 2026 (PEF 2026) en la Cámara de Diputados.
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El tema de seguridad, y particularmente el crimen del edil michoacano, terminó por dominar la sesión de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, donde Morena y sus aliados aprobaron el proyecto con 39 votos a favor y 15 en contra, sin modificaciones al dictamen enviado por la presidenta Claudia Sheinbaum.
Para la oposición, el caso Manzo reflejó la falta de estrategia del gobierno federal para contener la violencia y la precariedad en la que operan las policías locales.

Desde el oficialismo defendieron el PEF y acusaron a la oposición de usar políticamente el asesinato.
Las bancadas del PRI, PAN y Movimiento Ciudadano coincidieron en que el presupuesto del próximo año deja en el abandono a los municipios que enfrentan al crimen organizado.
“Lo ocurrido este fin de semana en Michoacán debe hacernos reflexionar. Si de verdad piensan en los mexicanos, deberían reasignar más recursos a seguridad pública”, advirtió el priista Arturo Yáñez.
En el mismo tono, la legisladora Nadia Navarro subrayó que el caso de Uruapan no es aislado:
“Hoy es Carlos Manzo, pero existen 2 mil 477 alcaldes más que están enfrentando al crimen organizado y siendo amenazados con el cobro de piso. Todos los días este modelo de negocio del crimen se fortalece”.
Desde el PAN, el diputado Héctor Saúl Téllez advirtió que el Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP) apenas tendrá un aumento del 1% real respecto a 2025.
“Lo que pasó con Carlos Manzo debe ser una llamada de atención. No queremos más presidentes municipales asesinados en el país”, dijo.
Los opositores también señalaron que el Presupuesto 2026 contempla recortes por más de 10 mil millones de pesos en áreas vinculadas a la seguridad, lo que, según alertaron, “profundizará la precariedad de las corporaciones locales”.
Las intervenciones del bloque oficialista buscaron desmontar las críticas y colocar la responsabilidad histórica de la violencia en los gobiernos anteriores.
“Mis condolencias a la familia y al pueblo de Uruapan, pero en honor de la verdad, Carlos Manzo señaló quién era el responsable de la violencia en Michoacán: un expresidente espurio que incendió el estado con su guerra”, afirmó la morenista Antares Vázquez, en alusión al expresidente Felipe Calderón.
Otra diputada de Morena, Rafaela Vianey García, elevó el tono del debate y respondió con dureza a las acusaciones de la oposición:
“¡No seremos ni tantito de lo mierda que ustedes fueron! Lo que vivimos hoy es consecuencia de su guerra fallida contra el crimen en Michoacán”.
Tras el intercambio de señalamientos, la mayoría oficialista mantuvo el dictamen sin cambios y lo envió al Pleno para su discusión final.
El Presupuesto 2026 prevé un gasto total de 10 billones de pesos, con un ajuste de alrededor de 16 mil millones que serán transferidos desde el Poder Judicial y el INE hacia programas del campo, educación, cultura e infraestructura carretera.
La discusión en el Pleno se llevará a cabo entre el martes y el viernes, periodo en el que se espera una maratónica sesión con cientos de reservas por parte de la oposición, aunque el bloque mayoritario de Morena y aliados difícilmente permitirá cambios de fondo.
El crimen de Carlos Manzo ocurrió el 1 de noviembre, durante un evento público en el centro de Uruapan.
El agresor, identificado como Osvaldo Gutiérrez Vázquez, alias “El Cuate”, presunto miembro del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), fue abatido poco después del ataque.

De acuerdo con las investigaciones, “El Cuate” estaba relacionado con los hermanos Ramón y Rafael Álvarez Ayala, conocidos como R1 y R2, operadores del CJNG en la región.
El fiscal Carlos Torres Piña informó que el atacante se hospedó horas antes del crimen en un hotel cercano y dio positivo a pruebas de rodizonato de sodio.
“Las pruebas confirman que fue el autor material de estos hechos”, declaró el fiscal.
El asesinato desató una ola de protestas en Michoacán. El 2 de noviembre, cientos de personas salieron a las calles de Morelia para exigir justicia y responsabilizar al gobierno estatal de Alfredo Ramírez Bedolla por la creciente violencia.
Con pancartas con frases como “¡Fuera Morena!” y “¡Fue Morena!”, los manifestantes recordaron la trayectoria del edil asesinado.
“Apagaron tu luz, pero tu lucha sigue”, se leía en una de las mantas.
Carlos Manzo, de 40 años, fue diputado federal por Morena entre 2021 y 2024, pero llegó a la alcaldía de Uruapan como candidato independiente, tras romper con el partido oficialista. Su muerte volvió a poner sobre la mesa la vulnerabilidad de los gobiernos locales frente al crimen organizado.