
Foto: Tomada de X
Los lujos de José Ramón López Beltrán reavivan críticas sobre la congruencia entre el discurso de austeridad de la 4T y el estilo de vida del hijo mayor del presidente.

José Ramón López Beltrán, hijo del expresidente Andrés Manuel López Obrador, fue captado saliendo de la boutique de lujo Loro Piana en Houston, Texas, mientras sostenía en la mano una bolsa de la marca francesa Hermès, conocida por su exclusividad y alto precio.
El video se difundió en redes sociales y generó reacciones en plataformas como X, donde varios usuarios compartieron las imágenes que muestran al hijo mayor del exmandatario tras realizar compras en la zona comercial de alto nivel.
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La tienda Loro Piana, ubicada en una de las áreas más exclusivas de Houston, se especializa en prendas y accesorios de lujo con precios elevados, lo que reforzó la atención sobre el clip que circula desde la noche del 24 de diciembre.
Mientras se observa a López Beltrán con bolsas de compra, también se notó que voltea a la cámara, aparentemente consciente de que estaba siendo grabado.
La escena no pasó desapercibida en redes sociales, donde usuarios hicieron comentarios sobre el contraste entre el estilo de vida observado y el discurso de austeridad que caracterizó la administración de su padre.
La presencia de marcas como Loro Piana y Hermès —símbolos del llamado “quiet luxury” o lujo silencioso— alimentó críticas en comunidades digitales que debatieron sobre la coherencia entre las prácticas consumistas y los valores públicos promovidos por el expresidente y sus cercanos.
Desde el inicio del sexenio de Andrés Manuel López Obrador, el estilo de vida de sus hijos ha sido objeto de escrutinio público, especialmente cuando han surgido reportes sobre residencias, viajes y consumo en entornos de alto poder adquisitivo. La polémica más recordada fue la llamada “casa gris” en Houston, habitada por José Ramón López Beltrán, que detonó cuestionamientos sobre posibles conflictos de interés y un contraste directo con el discurso de austeridad republicana impulsado desde Palacio Nacional.
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A estos señalamientos se sumaron posteriormente viajes y apariciones en destinos de lujo. Uno de los casos más comentados fue el viaje de Andrés Manuel López Beltrán, “Andy”, a Tokio, Japón, donde fue captado en zonas exclusivas y restaurantes de alto nivel, lo que reavivó el debate sobre el origen de los recursos y la congruencia con los principios de la Cuarta Transformación. Aunque el expresidente sostuvo que sus hijos no son servidores públicos y tienen derecho a viajar y gastar su dinero como mejor les parezca, estos episodios han alimentado una narrativa persistente de incongruencia entre el discurso político de la 4T y las prácticas de su círculo familiar, manteniendo la polémica en la agenda pública.