
Foto: CUARTOSCURO
LOS LÍDERES DE LA POLÍTICA
Donald Trump firmó un MPP el pasado 20 de enero y busca continuar con el programa “Quédate en México”.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, negó esta mañana que México esté en camino a convertirse en un “tercer país seguro”. De acuerdo con la mandataria, el gobierno estadounidense no ha solicitado al gobierno mexicano convertirse en tercer país seguro para los migrantes.
La mandataria aclaró que el día de la investidura de Trump, el presidente de Estados Unidos sólo había firmado un protocolo de protección a migrantes, conocido como MPP por sus siglas en inglés y aseguró que es una medida a la que Trump ha recurrido con anterioridad, recordando lo sucedido en 2018 durante la administración de Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, negó que eso represente que México se convertirá en tercer país. Lo que sí aseguró es que por cuestiones humanitarias, el gobierno federal atiende a los migrantes extranjeros que se encuentran en México, pues no pueden dejarlos desvalidos.
El concepto de “tercer país seguro” surge tras la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, firmado en la convención de Ginebra, Suiza en 1951.
Se refiere a que, el segundo país destino de un migrante que busca asilo (siendo el primero el de origen) puede negarse a recibirlo y remitirlo a un tercero que considere que le puede dar la misma calidad de vida, para que permanezca ahí.
Este acuerdo afirma que el segundo país sólo podrá enviar al migrante a un tercero si este último cumple con las condiciones siguientes:
Por otro lado, ser un tercer país seguro también infiere que este no puede regresar a los migrantes a su país de origen.
Si México se convirtiera en un tercer país seguro, Estados Unidos tendría el derecho de rechazar a los migrantes que solicitan asilo y enviarlos a México, para que permanezcan aquí. Sin embargo, el gobierno federal ha buscado que esto no suceda, negociando que no existen las condiciones antes mencionadas, ni económicas ni estructurales, para convertirse en uno.