
Foto: Cuartoscuro
Ambos delincuentes fueron entregados a EUA hace unas semanas por el Gobierno de México
La Fiscalía de Estados Unidos confirmó que los fundadores de ‘Los Zetas’, Miguel Ángel y Omar Treviño Morales, conocidos como ‘Z-40’ y ‘Z-42′, librarán la pena de muerte.
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La decisión fue comunicada al juez Trevor McFadden en una carta firmada por Sophia Juárez, jefa en funciones de la sección de Narcóticos y Drogas Peligrosas del Departamento de Justicia de EUA.
“Estimado juez McFadden: El gobierno respetuosamente envía esta carta para informar a la Corte y a la defensa que la fiscal general ha autorizado y ordenado a esta oficina no perseguir la pena de muerte contra Miguel Treviño Morales y Omar Treviño Morales”, indica al escrito.
Los hermanos Treviño Morales fueron entregados a la justicia del vecino país el pasado mes de agosto, como parte de un acuerdo entre México y Estados Unidos.
Actualmente, los antiguos líderes de Los Zetas enfrentan cargos en la Corte del Distrito de Columbia por tráfico de drogas, crimen organizado, posesión de armas de fuego y lavado de dinero.
Su próxima audiencia está programada para el 14 de octubre.
Miguel Ángel Treviño Morales ‘Z-40′ y Omar Treviño Morales ‘El Z-42′ son hermanos y exlíderes de la temida organización criminal ‘Los Zetas’, reconocidos por su extrema violencia.
Nacido en Nuevo Laredo, Tamaulipas, Miguel Ángel Treviño Morales inició su vida criminal en la adolescencia y se unió al Cártel del Golfo en la década de los 90, formando parte del grupo de escoltas que, con el tiempo, se convertiría en Los Zetas.
En 2012, tras la muerte de Heriberto Lazcano ‘El Lazca’, asumió el liderazgo del grupo.
Fue capturado en julio de 2013 en Nuevo Laredo y se le acusa de narcotráfico, tráfico de inmigrantes, secuestro y extorsión.
Se le ha vinculado con masacres de migrantes en San Fernando, Tamaulipas, entre 2010 y 2011.
Por su parte, Omar Treviño Morales, nacido en 1974, asumió el liderazgo de Los Zetas tras la captura de su hermano.
Fue arrestado en marzo de 2015 en San Pedro Garza García, Nuevo León.
Se le relaciona con el asesinato de 72 migrantes en San Fernando en 2010 y el incendio del Casino Royale en Monterrey en 2011, que causó la muerte de 52 personas.