
Foto: Cuartoscuro
Desde tiempos de Felipe Calderón, el estado no logra disminuir los índices de inseguridad pese a que por en el poder ya pasaron mandatarios del PRI, PRD y Morena.

Michoacán sigue siendo uno de los estados más golpeados por la violencia en México, sin importar el partido que ocupe el poder federal o estatal.
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Desde el inicio del sexenio de Felipe Calderón, cuando se lanzó la llamada “guerra contra el narcotráfico”, la entidad ha sido epicentro de enfrentamientos, extorsiones, desplazamientos forzados y asesinatos vinculados al crimen organizado.
En los últimos 19 años, Michoacán ha sido gobernado por diferentes fuerzas políticas, PRI, PRD y Morena, pero ninguna ha logrado contener la inseguridad ni desmantelar las redes criminales que operan en la región.
Durante este periodo, siete mandatarios, incluido un interino, han encabezado el gobierno estatal, enfrentando crisis de violencia, corrupción y desconfianza ciudadana.
El tema volvió a cimbrar al país tras el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, ocurrido el 1 de noviembre de 2025, cuando un joven de 17 años le disparó en pleno Festival de las Velas.

El crimen, cometido en uno de los municipios más importantes de la entidad, volvió a poner a Michoacán en el centro del debate sobre la fallida estrategia de seguridad.
Lázaro Cárdenas Batel asumió la gubernatura de Michoacán en 2002 siendo abanderado del PRD, en un contexto marcado por el crecimiento de los grupos del narcotráfico y la infiltración del crimen organizado en los municipios.
Su administración coincidió con el cierre del sexenio de Vicente Fox (2000-2006) y el inicio del de Felipe Calderón (2006-2012), cuando la violencia comenzó a recrudecer en la entidad.
En 2006, Cárdenas Batel pidió apoyo al entonces presidente Felipe Calderón para desplegar fuerzas federales en Michoacán. Este operativo sería el punto de partida de la llamada “guerra contra el narco”, que dejó miles de víctimas en la entidad, según La Crónica de Morelos.
Lázaro Cárdenas Batel proviene de una de las familias más influyentes en la historia política del país, pues es hijo de Cuauhtémoc Cárdenas y nieto del expresidente Lázaro Cárdenas del Río.
Cárdenas Batel estudió Etnohistoria en la Escuela Nacional de Antropología e Historia (ENAH) y antes de ser gobernador, fue diputado federal (1997-2000) y senador (2000-2001) por Michoacán.
Entre 2018 y 2023 fue coordinador de asesores del expresidente Andrés Manuel López Obrador, cargo que dejó para integrarse a la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).

Leonel Godoy Rangel asumió la gubernatura de Michoacán el 15 de febrero de 2008, con el respaldo del PRD. Su gestión comenzó en un momento crítico para el estado, cuando la violencia vinculada al crimen organizado ya consolidaba presencia y el aparato de seguridad estatal se encontraba débilmente articulado.
Durante su mandato se registró uno de los hechos más alarmantes: el atentado con granadas en la Plaza Melchor Ocampo de Morelia el 15 de septiembre de 2008, que dejó al menos siete muertos y más de 100 heridos.
Organizaciones políticas opositoras han señalado que el sexenio de Godoy Rangel marcó el inicio de lo que se denomina “narcoterrorismo” en Michoacán, con un repunte en los casos de homicidios múltiples, ataques a la población civil y colusión entre autoridades locales y grupos criminales.
Leonel Godoy Rangel nació el 5 de junio de 1950 en Lázaro Cárdenas, Michoacán. Es abogado, criminólogo y profesor universitario.
Según la página de Líderes Mexicanos, Godoy Rangel estudió Derecho en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH) y cursó una maestría en Criminología.
Inició su carrera pública como secretario de Gobierno de Michoacán en 1085 y ocupó cargos en el gobierno capitalino del entonces Distrito Federal, como la Secretaría de Gobernación en 1999 o la Secretaría de Seguridad Pública en el 2000.
Fue senador por Michoacán en 2006 y 2012, además de diputado federal por el PRD en 1994, antes de ser gobernador. Desde 2021 milita en el Morena, partido en el que ha alcanzado cargos como el de diputado federal.

Durante su administración, Vallejo asumió el cargo el 15 de febrero de 2012, abanderado por el PRI.
Su gestión estuvo marcada por graves señalamientos de corrupción, salud comprometida y la profundización del contexto de violencia en Michoacán, marcada por la presencia de organizaciones criminales como Los Caballeros Templarios.
En abril de 2013 solicitó licencia para atenderse un trasplante de hígado y el Congreso nombró a José Jesús Reyna García como gobernador interino.

Vallejo regresó en octubre del mismo año, pero su mandato concluyó antes del término habitual.
De acuerdo con Excelsior, Vallejo Figueroa nació el 17 de mayo de 1949 en Morelia, Michoacán y estudió Derecho en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH).
Cuenta con una maestría en Administración Territorial por el Instituto Internacional de Administración Pública y doctorado en Ciencias Políticas y Derecho Constitucional Comparado por la Universidad de La Sorbona, Francia.
Antes de ser gobernador fue presidente municipal de Morelia en tres ocasiones (1994-1995, 2002-2004 y 2008-2011) y ocupó diversos cargos en el PRI estatal.
Reyna García fue nombrado gobernador interino el 22 de abril de 2013 por el Congreso de Michoacán tras la licencia solicitada por Vallejo por problemas de salud.
Se desempeñó en ese cargo hasta el 23 de octubre de 2013, cuando Vallejo regresó al mandato.
Durante y después de su interinato enfrentó acusaciones graves: fue detenido en abril de 2014, acusado de presuntos vínculos con Los Caballeros Templarios, y estuvo recluido más de cuatro años.
De acuerdo a Milenio, nació el 22 de febrero de 1952 en Huetamo, Michoacán. Es abogado egresado de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, fue procurador del estado, secretario general de Gobierno de Michoacán en 1994 y dos veces diputado federal por el PRI.

Salvador Jara Guerrero asumió la gubernatura de Michoacán en junio de 2014, tras la licencia definitiva de Fausto Vallejo Figueroa.
Su llegada respondió a la crisis institucional derivada de los señalamientos de vínculos con el crimen organizado que marcaron el sexenio anterior.
Exrector de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, Jara fue designado gobernador sustituto por el Congreso local, bajo las siglas del PRI.
Su administración fue breve, de 2014 a 2015, y se concentró en mantener la estabilidad política de la entidad, aún sumida en la violencia provocada por los cárteles locales.
Aunque no enfrentó escándalos directos, su gestión estuvo marcada por la persistencia de los grupos criminales en Tierra Caliente y por el desgaste de las instituciones de seguridad.
Salvador Jara es licenciado en Ciencias Físico-Matemáticas por la UMSNH, maestro en Tecnología Educativa y Filosofía de la Cultura, y doctor en Filosofía de la Ciencia.
Ha desarrollado una amplia carrera académica y, tras su salida del gobierno estatal, se integró al ámbito educativo y de divulgación científica, además de subsecretario de Educación Superior de la Secretaría de Educación Pública de 2015 a 2018.

Silvano Aureoles, abanderado por el PRD, gobernó Michoacán de 2015 a 2021. Su mandato estuvo marcado por altos índices de violencia, escándalos financieros y tensiones políticas con el gobierno federal.
Durante su sexenio, la entidad mantuvo cifras elevadas de homicidios y enfrentamientos entre grupos criminales.
Aureoles fue criticado por sus declaraciones sobre la violencia, al calificar como “normal” la aparición de cuerpos embolsados, según Infobae, y posteriormente enfrentó investigaciones por presunto daño patrimonial al erario, derivado de contratos de infraestructura policial por más de 3 mil 400 millones de pesos.
El exgobernador es ingeniero agrónomo egresado de la Universidad Autónoma de Chapingo; además, se especializó en desarrollo rural.
Antes de llegar a la gubernatura, fue diputado federal, senador y presidente de la Cámara de Diputados.

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El actual gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla, llegó al poder en octubre de 2021 bajo las siglas de Morena.
Su administración enfrenta uno de los periodos más críticos de violencia política en la historia reciente de Michoacán.
Durante su mandato, se han registrado siete alcaldes asesinados y múltiples agresiones a funcionarios municipales.
La violencia ligada al narcotráfico y la disputa por el control territorial de los cárteles han mantenido a Michoacán como uno de los estados más peligrosos del país.
Desde el inicio de su gestión, ha señalado que la inseguridad es “herencia de la corrupción y la impunidad de gobiernos anteriores”.
Sin embargo, recientemente la página de Narcopolíticos lo agregó a su lista como otro funcionario con posibles nexos con el crimen organizado, en este caso, con Cárteles Unidos.
Antes de llegar al Ejecutivo estatal, Ramírez Bedolla intentó contender por la alcaldía de Morelia en 2015, donde quedó en sexto lugar, en una elección que ganó el independiente Alfonso Martínez Alcázar.
Tres años después, en 2018, fue electo como diputado local por el Distrito XVII (Morelia), cargo que ocupó hasta 2021, cuando pidió licencia para competir en las precampañas por la gubernatura.
En el plano académico, es licenciado en Derecho por la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
Dentro de Morena, ha sido uno de los perfiles más cercanos al expresidente Andrés Manuel López Obrador, participando activamente en la estructura del partido en Michoacán desde su fundación.
