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La información crucial se centra en la existencia de múltiples reportes de inteligencia militar que, desde 2019, vincularon consistentemente a Bermúdez con la extorsión y el narcotráfico.

La detención de Hernán Bermúdez Requena, alias “Comandante H”, exsecretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) de Tabasco, ha desatado una crisis de “narcopolítica” que impacta directamente a la cúpula del partido Morena.
Más allá de ser un caso de corrupción, la historia de Bermúdez es una crónica sombría de cómo las advertencias explícitas de la inteligencia militar fueron ignoradas “sistemática y deliberadamente” por dos de los líderes más importantes del movimiento: el expresidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y el exgobernador de Tabasco, Adán Augusto López Hernández.

La sombra de la omisión se remonta a la campaña electoral de 2018. La Fiscalía General de la República (FGR) investiga que la posterior designación de Bermúdez en la SSPC no fue accidental, sino la recompensa de un pacto político-criminal.
Según el testimonio de un colaborador (“CTDR”) y exintegrante del grupo criminal “La Barredora”, Adán Augusto López avaló acuerdos con una célula del Cártel de Sinaloa para garantizar la tranquilidad de la jornada electoral en Tabasco. Bermúdez, entonces operador de seguridad de confianza del candidato, sostuvo al menos un encuentro con “El Pelón de Playas” para pactar esta “paz” criminal.

La promesa se cumplió 18 meses después, cuando López Hernández designó a Bermúdez en diciembre de 2019 como titular de la SSPC, a pesar de que para entonces ya existían reportes militares en su contra.
Esta promesa cumplida marcó el inicio de la doble vida de Bermúdez, quien, desde el cargo más alto de seguridad, supuestamente utilizó recursos institucionales para proteger y expandir las operaciones de “La Barredora”.
Mientras Bermúdez negaba públicamente la existencia de cárteles en Tabasco, el Ejército y la inteligencia militar ya le seguían la pista, documentando su ascenso de funcionario corrupto a “máximo líder” de una célula criminal.
Las alarmas se encendieron oficialmente el 12 de noviembre de 2019. Un informe detallado de la 30 Zona Militar, dirigido al Centro Fusión de Inteligencia (CERFI), señaló a Bermúdez Requena, quien fungía como Director de la Policía de Investigación de la FGE, por “posibles actividades ilícitas” y lo vinculó directamente con Trinidad Alberto de la Cruz Miranda, “El Pelón de Playas”.
Menos de un mes después, Adán Augusto ignoró esta advertencia y lo nombró Secretario de Seguridad.
Apenas 19 días después de asumir el cargo, un incidente criminal confirmó el riesgo que Bermúdez representaba: tras la detención de “El Pelón de Playas” el 30 de diciembre de 2019, apareció una narcomanta dirigida al nuevo titular de seguridad. El mensaje, registrado en los reportes militares, era lapidario: “Vamos por ti Hernán Bermúdez Requena por traidor”.

El Ejército intensificó la vigilancia, identificando a Bermúdez Requena como una “pieza clave en el entramado criminal”. Los reportes de inteligencia militar le asignaron formalmente el alias de “Comandante H”.

• Enero de 2021: La Sedena detectó que el “Comandante H” autorizó a “El Pantera” (Benjamín Mollinedo) a “tomar la plaza” de Huimanguillo y parte de Cárdenas tras la ejecución de un líder huachicolero, lo que confirmaba que las autoridades daban órdenes a los grupos delictivos.

• Febrero de 2021: La corrupción se documentó con cifras. El CERFI Sureste reportó que el “Comandante H” solicitó 500 mil pesos o “medio kilo” a “El Pantera” para intervenir y liberar a detenidos, concluyendo que había “corrupción de funcionarios” para colaborar con la delincuencia organizada a cambio de un pago.

• Octubre de 2021: Conexión con el Tren Maya: Reportes de inteligencia interceptaron conversaciones de “La Barredora” que revelaban un esquema para suministrar 180 mil litros semanales de huachicol para la construcción de la megaobra del Tren Maya.

En este punto, el cerco de información se cerró sobre la cúpula. En agosto de 2021, Adán Augusto López se unió al Gabinete de Seguridad de AMLO, y los informes que detallaban las actividades ilícitas de Bermúdez (incluyendo un “Diagnóstico Delictivo Regional”) llegaron a la base de datos del Centro Nacional de Inteligencia (CENI) en octubre de 2021.
Es decir, la información sobre el “Comandante H” estaba disponible para los más altos mandos del país.
La evidencia militar plantea serias preguntas sobre el encubrimiento u omisión por parte de los líderes morenistas, especialmente a la luz de las declaraciones previas de AMLO, quien en enero de 2019 había asegurado que el presidente “tiene toda la información” y que si no es así, “o es cómplice o se hace de la vista gorda”.

A pesar de que los reportes de Bermúdez comenzaron cuando Adán Augusto López Hernández era gobernador, y continuaron mientras era secretario de Gobernación y acudía a las mesas de seguridad, siempre negó tener conocimiento de las operaciones de Bermúdez. Sin embargo, CTDR, el testigo colaborador de la FGR, apuntó directamente al origen del problema: el pacto electoral.
El momento más evidente de la omisión ocurrió tras las filtraciones de Guacamaya Leaks, en octubre de 2022, que hicieron públicos los informes de la Sedena que vinculaban a Bermúdez directamente con el narcotráfico.
Lejos de iniciar una investigación inmediata, López Obrador defendió a Adán Augusto ante la prensa, minimizando los reportes y atribuyéndolos a un “ataque de la prensa conservadora”.
Esta defensa pública, ocurrida años después de que la inteligencia militar documentara extorsiones, el reparto de plazas y la conexión con el huachicol para el Tren Maya, permitió que el “Comandante H” continuara en su puesto de alto rango.
El fin de Bermúdez solo llegó cuando su control falló catastróficamente. Tras el “viernes negro” del 22 de diciembre de 2023 en Tabasco —un día antes de la visita de AMLO a la entidad—, el escándalo fue innegable.
De acuerdo con una filtración de Latinus sobre la carpeta de investigación, el gobernador interino Carlos Merino había dado la orden para controlar la violencia en el estado, ante la eventual visita de López Obrador.

Según la versión del testigo, a cambio de volver a tener el control de la seguridad en la zona, “El Comandante H” presuntamente autorizó a “El Prada” la muerte de los policías: Isabelino García de la Rosa, “El Chabelo” y José Zapata Jiménez, “Pepe Zapata”, pues según decía el funcionario “les convenía a todos relajar la situación”.
No obstante, el 22 de diciembre de 2023, un día antes a la llegada de AMLO a Tabasco, se registró un “viernes negro” en el estado, con balaceras en zonas de Villahermosa, 4 muertos, así como el intento de un motín en penales de Huimanguillo, Villahermosa y Comalcalco.
Aquel fracaso por contener la violencia al menos mientras AMLO estuviera en la región, se tradujo en la renuncia de Hernán Bermúdez unos días después, el 5 de enero de 2024.

Curiosamente, en 2025, la presidenta Claudia Sheinbaum reveló que, ante los indicios de corrupción, el expresidente López Obrador sí había solicitado la destitución e investigación de Bermúdez, lo que implica que la información crítica finalmente se reconoció, aunque la acción se tomó solo después de un colapso violento de la seguridad.
El expediente Bermúdez es el caso más claro de cómo la inteligencia militar operó en contra de un alto funcionario que, a la vez, fungía como líder criminal. La cronología de las alertas, desde el informe de la 30 Zona Militar en 2019 hasta la identificación como “Comandante H” en 2022, demuestra que la información estuvo disponible para los máximos responsables políticos.
La decisión de ignorar o minimizar sistemáticamente estos avisos, bajo el pretexto de un “ataque de la prensa conservadora”, constituye la piedra angular de la presunta omisión y encubrimiento que ahora persigue a la cúpula de Morena.
El caso no solo “salpica al núcleo a la cúpula de Morena”, sino que pone a prueba su discurso de justicia: “caiga quien caiga”.
“Este contenido se produjo con NotebookLM en un proceso de mentoría con la Red de Capacitadores en Herramientas Digitales, una iniciativa de Factual y Google NewsInitiative.”