
Foto: Red social X
La dirigente de Morena, Luisa María Alcalde, afirmó que espera concretar su alianza con el PT rumbo a los comicios locales en Coahuila.

Luisa María Alcalde, presidenta nacional de Morena, dejó entrever un ruptura con el Partido Verde, su principal aliado electoral desde el año 2018, pues contempló competir el próximo año solamente acompañado por el PT.
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Durante su visita a Torreón, Coahuila, la dirigente morenista adelantó que ya sostienen pláticas con el PT para competir por el Congreso local en 2026.
“Nosotros hemos venido platicando y vemos buenas condiciones para ir con el PT en la próxima elección. Esperamos que eso se pueda ya concretar próximamente y que podamos formalizar esta alianza, pero esperaríamos que podamos ir en conjunto Morena y Partido del Trabajo para la elección del 2026″, indicó Alcalde Luján.
Con esta declaración, crecen las especulaciones sobre el final de la alianza con el Verde, al no ser contemplado por la lideresa morenista para el Congreso cahuilense.

La coalición oficialista enfrenta una crisis interna de cara a las elecciones 2027. Principalmente por la reforma contra el nepotismo que aprobó el Congreso mexicano para evitar el traspaso del poder entre familiares.
La reforma presidencial estaba programada para aplicarse a partir de 2027; sin embargo, las negociaciones entre Morena y el PVEM lograron que esta medida sea aplicable hasta 2030.
Ante esta modificación, la presidenta Claudia Sheinbaum instó a Morena a aplicar el “candado antinepotismo” desde 2027, y así lo hizo.
Esto pone en la mesa una posible ruptura electoral con sus aliados de la 4T, principalmente en estados como San Luis Potosí.
El pasado domingo 14 de diciembre, el Congreso local aprobó una reforma electoral que obliga a los partidos a postular exclusivamente a mujeres para la gubernatura en el próximo proceso electoral, una medida que ha sido señalada como un “traje a la medida” para la senadora Ruth González Silva, esposa del actual mandatario, Ricardo Gallardo Cardona.

La iniciativa, que modifica tres artículos de la Constitución estatal y diversas disposiciones de la Ley Electoral, fue aprobada con 19 votos a favor provenientes de las bancadas del Partido Verde, PT, Movimiento Ciudadano, PRI, Nueva Alianza y dos legisladores del PAN.
En contraste, la fractura se hizo evidente con el voto en contra de los seis diputados de Morena, quienes se sumaron a dos panistas para rechazar el dictamen. La premura del proceso alimentó las críticas sobre una imposición política por parte del gobernador Gallardo.
Esta maniobra en San Luis Potosí choca directamente con la postura de la presidenta Claudia Sheinbaum, quien impuso un candado anti-nepotismo para evitar que familiares directos hereden cargos de elección popular de manera inmediata.

Si bien a nivel federal el PVEM y el PT lograron postergar la vigencia de la prohibición del nepotismo hasta 2030, Morena adoptó un acuerdo interno para aplicar este candado desde 2027.
Al no estar sujeto a estas reglas internas de Morena, el Partido Verde podría postular a la senadora por su cuenta, lo que obligaría a Morena a buscar su propia candidata y competir de forma separada, repitiendo el escenario de división vivido en 2021.
La aprobación de esta reforma no solo pone en duda la unidad de la Cuarta Transformación en el estado, sino que también marca el inicio de una estrategia propia del gobernador Ricardo Gallardo para mantener el poder regional, aun a costa de distanciarse de las directrices nacionales de Morena.