
Foto: Cuartoscuro
Sheinbaum ha respondido con templanza ante la hostilidad de Donald Trump y ello comienza a mandar señales de que está funcionando.
La presidenta Claudia Sheinbaum ha mostrado “cabeza fría” y templanza ante la retórica de su homólogo estadounidense Donald Trump. Conoce su estilo, polémico y vociferador. Por ello es que afirmó que se enfocaría solo en los decretos firmados, más allá del discurso que pueda adoptar el neoyorquino, quien está acostumbrado a los reflectores y a los realitys shows.
Ante sus embates, Claudia Sheinbaum ha respondido contundente, principalmente en el sentido de la defensa de la soberanía, así como el respeto a los derechos de los migrantes mexicanos, pues afirma que han sido la base de la economía estadounidense.
La presidenta mexicana envió en noviembre pasado una carta al entonces recién electo Donald Trump para responder a su amago de subir el 25% de los aranceles. En ella reclamó que México sufre las consecuencias del tráfico de armas procedentes de EUA, así como la demanda de drogas de la población estadounidense.
“El 70% de las armas ilegales incautadas a delincuentes en México provienen de su país, las armas no las producimos nosotros, las drogas sintéticas no las consumimos nosotros, los muertos por la delincuencia para responder a la demanda de drogas de su país, lamentablemente los ponemos nosotros”, reprochó Sheinbaum a Trump.
Además le dijo que no sería con aranceles como se atendería la migración ni el consumo de drogas de su población, sino con cooperación y entendimiento.
Claudia Sheinbaum también ha dejado claro que México está dispuesto a colaborar con Estados Unidos, pero aclaró que nunca será desde una posición de subordinación. Un discurso que marcó la diferencia en el trato de Trump con este país y con Canadá, a quien le ha invitado a sumarse como el estado 51.
“Las y los mexicanos somos un gran pueblo y hacemos una gran nación, cooperamos, trabajamos juntos y juntas, pero como iguales colaboramos, como país, con otros países y con nuestro vecino del norte, con Estados Unidos colaboramos, cooperamos, pero nunca nos subordinamos”, dijo en diciembre pasado.
En repetidas ocasiones, Trump ha llamado “criminales” a los migrantes y ante esos calificativos, la presidenta en respuesta ha pedido que los connacionales sean tratados con respeto, pues son la base de sectores en Estados Unidos y también apoyan la economía mexicana.
“Los mexicanos somos tan fraternos que este año se está rompiendo récord de las remesas. Es decir, estando allá no es que se olviden de las familias, al contrario, siempre están buscando la manera de apoyar, y por eso nosotros decimos que son héroes y heroínas de la patria”, señaló durante un evento a inicios de enero, en Puebla.
Sheinbaum también ha destacado la defensa del país ante los amagos del presidente republicano.
Días antes del regreso de Trump a la Casa Blanca y su tono en contra de México ante los amagos de cerrar la frontera y la categorización de los cárteles del narcotráfico como “organizaciones terroristas”, la mandataria de estirpe morenista lanzó:
“Siempre los vamos a defender porque mexicano y mexicana, en donde esté, tiene que ser respetado, porque a México se le respeta; somos una potencia cultural”, señaló.
Luego de que Donald Trump amagó con cambiarle el nombre del Golfo de México como Golfo de América, la presidenta respondió con una clase de historia, al afirmar que ese cuerpo de agua, que abarca territorio nacional - Cuba y Estados Unidos, recibió su nombre desde hace más de 500 años.
Además, en un tono irónico recordó que en la Constitución de Apatzingán el territorio que perteneció a México se le conocía oficialmente como “América Mexicana”.
“¿Por qué no lo llamamos ‘América Mexicana’? Suena bien, ¿verdad?”, respondió Sheinbaum.
Al llegar al poder, Trump hizo oficial que en su territorio el Golfo de México sería conocido como Golfo de América, cambió que ya entró en vigor, incluso reconocido así por la plataforma de Google Maps.
En respuesta, la presidenta de México anunció que enviaría una carta a Google para que el cambio del Golfo de América sea solo en territorio estadounidense, pero en las aguas internacionales siga el nombre oficial que es Golfo de México.
Además anunció: “también le vamos a pedir que América Mexicana aparezca, que cuando uno ponga América Mexicana aparezca el mapa de la América Mexicana”.
Claudia Sheinbaum también ha desestimado que Estados Unidos cumpla con su amago de imponer el 25% de los aranceles a las exportaciones mexicanas, pues existe diálogo con el Gobierno de Estados Unidos.
“No creemos que vaya a ocurrir, como les digo hay conversaciones, hay diálogo, entonces no creemos que vaya a venir esta definición de los aranceles. Pero también ya estamos preparados”, dijo la mandataria quien presumió las conversaciones que hay con aquel país, a través de la Cancillería.
A esta declaración le siguieron los dichos del secretario de Comercio de EUA, Howard Lutnick, quien afirmó que los aranceles a México podrían no implementarse si continúan actuando en contra del fentanilo y la migración ilegal.
“Es un arancel para conseguir acciones en México y Canadá. Y hasta donde yo sé están actuando rápido y si siguen así no habrá aranceles”, señaló el funcionario durante su comparecencia en el Senado de EUA.
Ante el tono de Donald Trump contra los migrantes y el narcotráfico, Claudia Sheinbaum ha hecho frente, principalmente en el tema de los connacionales pues ha manifestado su rechazo a que sean llamados “delincuentes” y sobre la designación de los cárteles como “terroristas”, la mandataria ha afirmado que el republicano tiene derecho a actuar en su país; sin embargo en México, afirmó, habrá colaboración, más no subordinación.